Dopaje

Ben Johnson fue el primer gran caso de dopaje de mi época. Me parecía algo extravagante y sobre todo estúpido que alguien se drogara para mejorar en su disciplina ( qué ignorante). Durante los años noventa el tema parecía que no existía, pero de golpe el Caso Festina demostró que era algo generalizado en el ciclismo. Los testimonios de Jesús Manzano, la Operación Puerto y todos los casos que han salpicado a ciclistas y ganadores del Tour durante la primera década de este siglo, ha hecho que de dopaje hablemos cada año.

Y es que el ciclismo ha sido el gran estigmatizado en el mundo del deporte a causa del doping. Pero el dopaje también ha salpicado a otros deportes, a Marion Jones, le quitaron todas las medallas y records porque reconoció que se dopaba (y eso que nunca dio positivo). La Juventus de Turín fue sancionada (al menos sus médicos, el fútbol no se toca) por suministrar EPO a sus jugadores entre el 94 y el 98 (no jugaba un tal Zidane allí con ellos?). El "inmigrante" Juanito Muehlegg y otros muchos que me dejo.

Ahora con la Operación Galgo, nos escandalizamos al descubrir que la mejor atleta española de todos los tiempos se dopaba, pero aún me escandalizo más cuando sale hoy en el periódico que en el 2006 en la Operación Puerto pudo haber una bolsa con su sangre. Pero es que la Operación Puerto es la gran Operación Encubrimiento, porque solo salieron nombres de ciclistas (y no todos, verdad Valverde), en las primeras informaciones había un montón de bolsas de sangre que luego misteriosamente desaparecieron.

El deporte entero está en duda, pocos se pueden creer que los deportes son independientes y que los deportistas de distintas especialidades no se relacionan entre ellos.

El deporte nos lo tendremos que plantear como una película con grandes dosis de "efectos especiales".