miércoles, 30 de septiembre de 2015

30 de septiembre de 2014




A veces todo se tuerce desde el principio. No piensas que todo va a ir mal. Empiezas los viajes y las aventuras con muchas ganas, pero las cosas se van torciendo, poco a poco, y empiezas a dudar de que todo va a ir bien.

Ahí estaba yo, después de mi primer viaje en avión, acompañando a mi hermana en los primeros días de su trabajo de doctorado en Dinamarca, para ayudarle en la mudanza y en lo que pudiera surgir.

- One ticket to Lyngby.

Ahí estaba yo, intentando comunicarme con el vendedor de tickets y remarcando mucho la g, al fin y al cabo soy manchego, mis cuerdas vocales son manchegas y remarcan mucho la g.

- sorry, where?

-Lyngggggg byyyyy

Con g pronunciada, de manera espaciada y alzando la voz, un experto en idiomas

-I don't understand you.

Joder no es tan dicifil, solo 6 letras, no puede ser tan difícil entender el nombre del pueblo.

- Ahhhh, Lyngby

Claro, después de escribirselo, porque era imposible que yo lo dijera bien, la pronunciación danesa de las ciudades no es lo mio. Se pronuncia la primera "y" casi como si fuera una "u" poniendo la boca así como si fueras a beber y la última casi igual pero mucho más corta.

Y con los tickets a Lyngby empiezas a sortear obstáculos, escaleras mecánicas que no funcionan mientras vas cargado como un mulo, taxistas en su primer día de trabajo, un alojamiento perdido en el bosque lleno de suciedad sin una ducha en condiciones (una de las "paredes" de la ducha eran la lavadora y la secadora puestas una encima de otra), la búsqueda de un nuevo lugar donde mi hermana pudiera vivir decentemente, la limpieza de la nueva habitación, unas costumbres diferentes, un clima diferente ...

Y no sabes como, que aunque sabes que van a ser días duros, van a terminar muy bien. Que todo este esfuerzo al final tendrá su recompensa, que ayudar a tu hermana te reportará algo que merezca la pena, aunque tarde unos años en llegar. Y lo que llega es algo por lo que cogerías ese avión mil veces y pasarías mil penurias. Porque la alegría y la felicidad que viene después es inmensa.


Felicidades Lukas. Muchas felicidades.



jueves, 24 de septiembre de 2015

Déficit fiscal, déficit solidario


"Espanya ens roba"
Jordi Pujol, molt honorable




Este lunes 27 de septiembre de 2015, se celebran las elecciones al Parlament de catalunya. Unas elecciones convocadas anticipadamente por el señor Artur Mas, que las ha querido presentar como unas elecciones plebiscitarias para una futura independencia de Cataluña.

A parte de que dentro del actual ordenamiento jurídico, esto no tiene sentido. Sin entrar en consideraciones sentimentales, ya que a nadie se le puede obligar a tener unos sentimientos patrióticos (ni independentistas), ni obviar que la postura del actual gobierno español y su forma de actuar es sumamente mejorable. Yo quiero centrarme en el principal argumento del President Artur Mas, el déficit fiscal resumido en el increíble, viniendo de quien venía, "Espanya ens roba".

Me duele mucho ver como se esgrime el déficit fiscal. Y es que uno de los principales objetivos de la política fiscal de la mayoría de los estados es la distribución de la riqueza, es decir que el que más tiene es el que más paga, tanto nominal como porcentual (esto es el ideal, luego no todos los impuestos consiguen esto, ni mucho menos). Por lo que pedir que todos los impuestos que se generan en cataluña, tienen que ser gastados en cataluña, me produce una animadversión absoluta.

Cataluña, es una de las regiones más ricas del estado español y por lo tanto tiene que ayudar a otras regiones que no lo son tanto, esto es así o debería ser así. Es que es como si un multimillonario dijera que tiene déficit fiscal con el estado español, porque no utiliza la sanidad pública ni la educación pública, y por lo tanto no va a pagar más impuestos y se declara insumiso fiscal. Tócate las narices.

Que el señor Artur Mas, perteneciente a un partido político de derechas y que ha realizado una serie de políticas neo-liberales durante su mandato esgrima esto, pues me parece hasta casi normal, me produce un asco tremendo, pero lo puedo ver normal. Pero que se haya unido a la causa, presentándose de manera conjunta a estas elecciones, el partido Esquerra republicana de catalunya, es ya el sumum de la hipocresía. Un partido que dice llamarse de izquierdas no puede defender este tipo de planteamientos, pero como la clase política española nos está acostumbrando a este tipo de incongruencias, pues ya lo ven hasta normal.

Y es que el debate que estamos viviendo estos meses a cuenta de una hipotética independencia está siendo vergonzoso, por parte de ambos "bandos".

La explicación de las consecuencias de una secesión por parte de la plataforma "Junts pel si" está siendo ridícula, afirmando que son todo ventajas y ningún inconveniente. Nada pasaría, incluso, ellos que dicen que no quieren ser españoles, a sentirse orgullosos de que según la constitución, esa que se quieren saltar, seguirían siendo españoles (punto por otra parte cierto), amén de otras consideraciones tales como que no salen del Euro, etc.

Y por parte del gobierno de nuestra nación, la escalada de consecuencias negativas, llegando hasta el Armaggedón si se declara unilateralmente la independencia, está siendo vergonzoso.

Hay una parte de la sociedad catalana que quiere la independencia, algo muy complicado con las leyes actuales, porque las leyes están para cumplirlas, algo que se olvida muy a menudo, pero ese sentimiento y esas ganas la tienen, pues intentemos llegar a acuerdos, a nexos en común a objetivos realizables. La inteligencia emocional es algo que brilla por su ausencia entre nuestros líderes, algo comprensible porque pocos han demostrado trabajar por el bien común, mostrándonos además una y otra vez que trabajan para seguir en el poder o conseguirlo.

Así que con este panorama nos esperan unos días y semanas moviditos sobre todo por ver la catadura moral de nuestros dirigentes.